DE SANTA ANA A ALMONASTER POR LA CORTE Y CALABAZARES.
Es esta una travesía fácil si la hacemos sólo en el sentido
que aquí proponemos, de manera que tengamos un coche en el punto de destino
para volver a Santa Ana. Si la hacemos de ida y vuelta nos encontraremos con la
dificultad de las rampas de ascenso en el camino de regreso a partir de la
Corte, cuando ya estamos más fatigados.
Partimos desde unos 640 metros de altitud en la Plaza de España, junto a la Iglesia de
Santa Ana, para rodeándola tomar la calle que sale a la derecha cuesta abajo y poco
después cogeremos a la izquierda. Veremos indicaciones del camino.
Tomaremos la calle que, con una fuerte pendiente
descendente, va dejando atrás el núcleo urbano. En ella podemos destacar la
presencia de algunos viejos caserones serranos y una fuente abrevadero en una
pequeña plazuela. A la derecha, muros de piedra con helechos rupícolas (Cheilantes maderensis, Asplenium ceterach). El camino está hormigonado y
empedrado a tramos.
Vamos descendiendo poco a poco entre algunos campos con
olivos que posteriormente dan paso a dehesas de encinas. En gran parte el
camino se halla flanqueado por muros de piedra. Dejamos a nuestra derecha una
finca llamada Matravieso o Maltravieso
y nuestro camino vira ligeramente a la izquierda. Al poco de iniciar el
descenso ya vemos a lo lejos las casas de la aldea de La Corte. En este tramo
podemos observar en los márgenes del camino diversos arbustos como lentiscos (Pistacia lentiscus), aladiernos (Rhamnus alaternus), labiérnagos (Phyllirea angustifolia), olivillas (Rhamnus lyciodes), arrayanes (Mirtus communis) y algún piruétano (Pyrus bourgeana), coscojas (Quercus coccifera), matagallo (Phlomis purpurea) y torvisco (Daphne gnidium). Entre las jaras
predomina el Cistus monspeliensis,
acompañadas normalmente de tojos (Ulex
eriocladus) y brezos (Erica arborea
y E.australis)
Ermita de la Virgen del Rosario. La Corte |
Una vez que llegamos a la carretera nacional la cruzamos en
línea recta para proseguir nuestro camino, que, tras descender unos metros más,
se adentra en La Corte. Seguiremos la
calle de frente y después ligeramente a la izquierda hasta encontrarnos con la
Ermita de Nuestra Señora del Rosario, junto a una pequeña plaza con bancos.
Continuaremos cuesta abajo por la calle situada al otro costado de la iglesia
hasta salir de la aldea. Desde aquí disfrutamos de amplias vistas del valle con
Calabazares al fondo.
Seguimos bajando de cota tras abandonar la aldea de la
Corte, entre pequeñas huertas y explotaciones ganaderas. Al fondo a la
izquierda vemos un monte con pinos, y llegaremos a una ligera curva a la
derecha en la que el agua de un barranco cruza por encima del hormigón de
nuestro camino. Además de adelfas y juncáceas podemos observar algunas plantas
de marrubio (Marrubium vulgare), así
como Teucrium fruticans.
La Corte. Calabazares al fondo |
Continuamos hasta llegar a una rivera más caudalosa. Es la rivera de Escalada, punto en el que
sale un camino hacia nuestra izquierda que nos lleva a la aldea de Escalada,
perteneciente al municipio de Almonaster la Real, aunque su destino último como
reza en la indicación es Riotinto. Hemos llegado al punto más bajo de nuestro
itinerario, a unos 420 metros de altitud, y nuestro camino inicia una ligera
cuesta arriba entre huertas y campos con olivos, encinas e higueras hasta
alcanzar Calabazares. Hemos
descendido desde la plaza de Santa Ana unos 220 metros.
El camino hormigonado se encuentra separado de los campos
colindantes por viejos muros de piedras planas con abundante vida vegetal
enraizada entre sus grietas (Sedum
sedifome, Cheilantes maderensis,
Umbilicus rupestris, Asplenium ceterach, …y diversos musgos) Algunas
retamas (Retama sphaerocarpa), vincas
(Vinca minor) y olivillas (Teucrium fruticans) pueblan las cunetas.
Saliendo de Calabazares caminaremos unos metros más por la
carretera y tras las últimas casas dejaremos la carretera para tomar un
estrecho camino que, paralelo a la misma, continúa hacia Almonaster. Si
queremos hacer aquí una parada podemos abandonar el camino y tomando un
senderillo que sale a la izquierda refrescarnos en una hermosa fuente de
piedra, en la que los lugareños se abastecen del preciado líquido. El camino
discurre entre la carretera que va desde Calabazares a la A-470 y un barranco
con abundante vegetación riparia: adelfas (Nerium
oleander), alisos (Alnus glitinosa),
juncos y una maraña de zarzas (Rubus
ulmifolius) y zarzaparrillas (Smilax
aspera).
El terreno se ha vuelto pizarroso. A nuestra izquierda
observamos una loma con eucaliptos, mientras que a la derecha del barranco lo
que hay son pinos (Pinus pinaster).
Seguimos subiendo hasta que el camino por el que paseamos desemboca en la
carretera poco antes de la general A470. Justo llegando a la carretera general
tras un brusco giro a la izquierda continúa nuestro camino en dirección a Almonaster la Real. Hemos de tener
cuidado de tomar de los dos caminos que parten
a la izquierda el que está más a la izquierda y con muros de piedra a
ambos lados.
A partir de aquí el sendero se hace más amable y acogedor.
Se encuentra empedrado, y con una disposición del pavimento bastante cómoda y
lisa. La vegetación ha cambiado drásticamente. El camino se ha vuelto más
fresco y húmedo y la vegetación más frondosa, Empiezan a predominar los
alcornoques. Nos encontramos con algún fresno (Fraxinus angustifolia). Y pasamos por zonas con grandes quejigos (Quercus faginea) mezclados con los
alcornoques (Quercus suber). Los
muros de piedra y taludes que enmarcan el sendero se hallan tapizados por
musgos, ombligos de Venus (Umbilicus
rupestis) y helechos (Asplenium trichomanes, Asplenium onopteris y Asplenium ceterach). Si hacemos nuestro
recorrido a finales de invierno o principios de primavera nos sorprenderá la
floración amarilla intensa de los escobones (Cytisus arboreus subsp baeticus). Pasaremos en este tramo también
junto a un formidable ejemplar de majuelo (Crataegus
monogyna)., o tilero, como se le llama localmente por usarse sus hojas como
infusión tranquilizante
En algunos puntos de este último tramo, en lo alto del
cerro, se ve en la lejanía el castillo de Almonaster y su mezquita.
Cytisus arboreus subsp baeticus |
Continuando el ligero ascenso entre grandes alcornoques
llegaremos al cruce de la A470 y la carretera que sale a su izquierda hacia La
Escalada. Desde aquí disfrutaremos de una grandiosa panorámica de Almonaster y
daremos por finalizado nuestro trayecto.
Almonaster la Real |